El crowdsourcing ha venido para quedarse :)

Este es otro término que nos empieza a llegar con fuerza y que hace que nos encojamos de hombros si nos preguntan por su significado. La mejor definición, la podemos encontrar en boca de su creador Jeff Howe (podemos seguirle en twitter en @Crowdsourcing), y para los que hemos trabajado en el sector servicios, no nos resultará muy difícil de entender: se trata de una contracción de las palabras crowd y outsourcing, multitud y externalización. Es el sueño de cualquier empleador, la subscripción voluntaria de multitudes para realizar un trabajo. Y para colmo, en la mayor parte de los casos, sin un salario a cambio 😮

¿Esto es así realmente? No del todo, Jeff Howes, habla de cuatro estrategias para el crowdsourcing,denominados crowdfunding, crowdcreation, crowdvoting y crowdwisdom. Esas estrategias permitirían financiar proyectos en base a aportaciones de un grupo numerosos de personas, el diseño y desarrollo de un producto, el gobierno y la inteligencia colectiva. Es cierto que hay críticas respecto al tema del salario, el sobrecoste de una plataforma para la integración y conversación de los individuos, la calidad del producto final, y muchas otras pero hay grandes ejemplos de que este tema funciona.

Crowdsourced Graphic Design by 99designs

Siempre he creído en los proyectos cooperativos, pero dar el salto de escala que supone un proyecto en este ámbito plantea muchos problemas que la tecnología y la web resuelven satisfactoriamente. La brecha tecnológica no existe entre los profesionales y el ámbito domestico por la facilidad de manejo de herramientas y tecnologías. Así, el limite es únicamente creativo y muchas empresas utilizan el crowdsourcing como parte de sus procesos de negocio desarrollando la infraestructura necesaria para ello. Es el caso de muchas empresas farmacéuticas y de investigación, aunque también tenemos ejemplos en el ámbito del diseño www.crowdspring.com/, recursos humanos (www.talentag.com) como se explica el el blog de Territorio Creativo y de Enrique Dans.

A veces, no es tan complicado y una aplicación bien diseñada implementa una idea que la multitud utiliza y da vida al proyecto: una de mis favoritas es sin duda Urban Forest Map (http://urbanforestmap.org/). Los particulares pueden identificar especies vegetales sobre un mapa y ver la huella ecológica que produce y así determinar las especies más duraderas, sostenibles en un área concreta de la ciudad de San Francisco. La información que proporcionan a la administración para conservación de parques y jardines es fundamental, ya que además de la información de actualización y alta de especies vegetales pueden notificar alarmas sobre un determinado árbol con alguna incidencia.

Otras iniciativas están en el ámbito del automóvil, donde los usuarios de GPS corrigen y actualizan la información de los servidores de las marcas e incluso han puesto en marcha una nueva iniciativa comercial en este ámbito.

En el ámbito político, países como Islandia han utilizado este modelo para elaborar la reforma de la constitución. Se ha fomentado el debate a través de muros de Facebook, debates en Twitter y vídeos a través de Youtube. El resultado y desarrollo del proyecto lo podéis encontrar en este blog de Yorokobu.